Hay varias opiniones sobre la primera quema de libros. Algunos dicen que los pioneros fueron los nazis, pero otros dicen que fueron los españoles. Los españoles hicieron su primera quema de libros organizada por las izquierdas en 1934, donde arrasaron con dinamita y fuego la biblioteca de la universidad de Oviedo y otra en Portugalete, una de las más importantes de Europa. La Universidad Central de Madrid sufrió una quema de libros en abril de 1939 organizada por la Falange una vez acabada la guerra civil, para defender sus derechos como españoles. Estos solo son unos meros ejemplos de diferentes formas de pensar; que como no, la política siempre de por medio, y que hoy en día sigue ocurriendo lo mismo. La quema de libros viene dada por defender las opiniones propias e intentar que las opuestas no se divulguen o las propias no se vean ofendidas.
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